en 12 cuotas de sin interés

Llega hoy sábado

Solo en Santiago de Chile

Comprando dentro de las próximas 8 h 32 min

¡Última disponible!

Vendido por SANTIAGO_ARCOS

+500 Productos

+50

Ventas concretadas

Brinda buena atención

Entrega sus productos a tiempo

Medios de pago

Cuotas sin Tarjeta

Mercado Crédito

Tarjetas de crédito

American Express
Visa
Mastercard
Diners

Tarjetas de débito

Visa Débito
Mastercard Débito

Características del producto

Características principales

Autor
André Maurois
Idioma
Español
Editorial del libro
Juventud
Tapa del libro
Blanda
Año de publicación
1952

Otros

Cantidad de páginas
116
Con páginas para colorear
No
Con realidad aumentada
No
Género del libro
Biografía
Tipo de narración
Ensayo

Descripción

Producto usado
Puede tener marcas estéticas, daños funcionales y no incluir su empaque o sus accesorios originales. Lee atentamente la descripción o pregúntale al vendedor para conocer más.

BUEN ESTADO
(sobrecubierta reparada)

VOLTAIRE
André Maurois
Juventud, 1952; tapas blandas con sobrecubierta; 116 pp.

"¿Por qué, entre todos los filósofos del siglo XVIII, este filósofo tan pequeño aparece como el más ilustre? Quizá sea porque, de este siglo burgués y de caballeros, universal y frívolo, científico y mundano, europeo y sobre todo francés, Voltaire, que era el único de todo esto, da el cuadro más completo. Agregue que era extremadamente francés en el sentido de que los extranjeros lo entienden. El resto del planeta siempre ha amado a los escritores en Francia que, como él, expresan ideas simples con claridad, ingenio y cortesía. Esta mezcla en particular no es toda Francia, pero es parte de Francia y en el mejor de los franceses siempre hay un poco de ella. Fue gracias a Voltaire que el francés, en el siglo XVIII, fue, más que nunca, la lengua de Europa y la gloria de la lengua, reflejada en los espejos de las cortes europeas, rodeó al anciano de Ferney con una brillantez sorprendente. Por último, pero no menos importante, estaba maravillosamente vivo y los hombres, que temen al aburrimiento incluso más que a la preocupación, están agradecidos con quienes los hacen vivir a un ritmo más rápido y más fuerte. En el diluvio de panfletos, epístolas, novelas, poemas y cartas que, desde Cirey, desde Berlín, desde Ferney, descendieron sobre Francia durante tanto tiempo, estaba lo trivial y lo excelente. Pero todo fue rápido, alegre y, al son de los violines de M. de Voltaire, los franceses sintieron que sus espíritus cobraban vida..."

Preguntas y respuestas

¿Qué quieres saber?

Pregúntale al vendedor