Quemados Vivos. Rodrigo Y Carmen Gloria Patricia Verdugo
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DescripciĂłn
No recuerdo en quĂ© momento decidiste hacer un libro con la historia de Carmen Gloria Quintana y Rodrigo Rojas, pero sĂ sĂ© con quĂ© fuerza asumiste que habĂa que dejar registro de la mentira que difundĂan las autoridades del RĂ©gimen a travĂ©s de todos sus medios y contrastarla con la verdad de lo ocurrido.
Recuerdo tu ira cuando escuchamos al entonces subsecretario del Interior afirmar con vehemencia en una conferencia de prensa que todas aquellas informaciones que decĂan que los autores de esas horribles quemaduras en los cuerpos de Carmen Gloria y Rodrigo eran militares, formaban parte de una campaña destinada a “utilizar polĂticamente esta desgracia lamentable”. En ese mismo momento supimos que no habrĂa justicia.
No logro identificar el momento preciso en que decidiste hacer este libro. Pero sĂ sĂ© que las mentiras del vicealmirante Carvajal, del general Ojeda y de Alberto Cardemil, entre muchos otros, aportaron una cuota del estĂmulo que necesitabas. La idea la fuiste amasando en tu cabeza al mismo tiempo que recorrĂas las calles de Santiago en busca de los testimonios que te permitirĂan dilucidar cĂłmo y quiĂ©nes habĂan quemado a los dos jĂłvenes que tan profundamente te habĂan impactado.
Y era en esos momentos, los de mayor tensiĂłn, cuando tĂş desplegabas tus mejores cualidades para enfrentar una investigaciĂłn periodĂstica. Eras una cirujana. Todo lo ibas ordenando en estricto orden por referencia temática. Y cuando te decidĂas a escribir, tu escritorio era como un quirĂłfano: en un rincĂłn estaban los hechos confirmados, cuidadosamente relatados por voces autorizadas –testimonios que habĂas rescatado arduamente, transcrito desde tu grabadora y sintetizado–; en otro rincĂłn, las versiones que debĂas chequear. Desde tus dedos tecleando la máquina, los personajes hablaban claro y conciso.
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